Porque esta en todos lados.
Desde que el espermatozoide ganador se fecunda con el óvulo y nacemos...desde ese primer instante, el sexo esta en nuestras vidas. Sin embargo, no te llama tanto la atención hasta que tienes 16, corrección...17 años y un paquete de hormonas alborotadas esperando sucumbir en otra persona.
Y justo tengo 17, sin embargo mi paquete de hormonas aún no esta tan alborotado...pero si mi curiosidad sexual, la cual despertó este año y se ha ido capacitando con experiencias ajenas, anécdotas y charlas amicales que QUIERA QUE NO, me están preparando.
Jamás iba imaginar que existían más de cien poses sexuales y que hay personas que realmente se preocupan por hacerlas. Jamás iba a imaginar que la espera a veces no es tan larga, y sobre todo que como existen previos para las fiestas, también previos para el acto sexual.
Y qué previos.
Si, este fin de semana previo a comenzar el segundo ciclo it's been all about sex, y tengo que admitir que yo creo en el sexo antes del matrimonio, porque a fin de cuentas el sexo es una necesidad inerte que tu cuerpo pide en cualquier momento con desesperación. Creo también, que tus hormonas necesitan dar esa gran descarga y tensión que tienen cuando están con alguien del sexo opuesto...sin embargo creo que cuando sea mi primera vez, casada, compremetida, enamorada, no tendré sexo...sino haré el amor.
Algo muy parecido al sexo, sólo que no sólo entregas tu cuerpo, sino también tu corazón.